martes, 28 de septiembre de 2010

¿Es China sostenible?


La República Popular de China experimenta un crecimiento anual alrededor de un 10% en su economía. Tiene una población de 1.3 billones de habitantes. Se ha convertido en la planta de producción del mundo, desde baratijas hasta alta tecnología. Y según estudios del Deutsche Bank, se espera que a principios de la década del 2020, este país de dominio político comunista, pero de práctica económica occidental, se convierta en la primera potencia económica del mundo.

China sobrepaso durante los últimos meses a Japón como la segunda economía del mundo. Quien es el mayor acreedor de deuda de los Estados Unidos, es serio en sus intenciones de fortalecer su brazo económico.

Ante este escenario hay que plantearse la pregunta: ¿será posible la consolidación económica de China?

Tratemos en primera instancia la distribución de la riqueza. Según el Fondo Monetario Internacional, su PIB per cápita de US$4000 ocupa el puesto 97 del mundo. Muy lejos del monto que ostentan los norteamericanos con US$48000. Un país de contrastes, en que mientras se abren tiendas Cartier y se venden Ferraris en la costa, en las zonas más profundas de China, la pobreza es extrema. China crece con focos desbalanceados de concentración de riqueza. Un ingrediente algo picante para la generación de levantamientos sociales.

Por otra parte, la mano de obra china está experimentando un aumento en el costo, según reportes de Reuters. El Banco Popular de China, recomendó fortalecer el mercado de consumo interno para garantizar la extensión y consolidación de su crecimiento a través del aumento de la capacidad adquisitiva de sus ciudadanos. Su mano de obra barata, uno de los factores de competitividad más claves para atraer inversión extranjera, se vería comprometida.

Además del problema del aumento del costo de mano de obra, el respetado economista chino Fan Gang, reconoció recientemente que China necesita 150 millones de empleos anuales para mantener un crecimiento anual de un 8%. Eso equivale a generar 375 empresas al año del tamaño de empleados que IBM actualmente posee. Costo y volumen parecieran confabularse conjuntamente.

Las exportaciones, otro de los pilares de crecimiento para China, pueden perder su atractivo ante la revaluación del yuan por las presiones internacionales de continuar la tendencia.

Paradójicamente, el sistema comunista chino no parece ser obstrucción. Este régimen comunista se ha preocupado por garantizar una dinámica económica occidentalizada. Su “socialismo de mercado” funciona como controlador de poder y facilitador de una estructura económica capitalista.

China se ha convertido en un gigante insaciable de crecimiento. Un crecimiento desproporcionado, que ilusiona. Un crecimiento que también, tarde o temprano, le costara cuestionamientos serios sobre derechos humanos y regulaciones laborales. Ciertamente, el fenómeno de China podría terminar en ser la historia de en un gigante con pies de barro.

Publicado en:
http://www.nacion.com/2010-10-07/Opinion/Foro/Opinion2547171.aspx
http://www.prensalibre.cr/pl/comentarios/33945-ies-china-sostenible.html

1 comentario:

IMPOETA dijo...

Es interesante cómo un monstruo de estos haya crecido económicamente bajo un sistema socialista.

Desgraciadamente, atinás muy bien al destacar que la distribución de la riqueza no sea la adecuada y sigan sufriendo tantas familias la pobreza.

Curioso es que la revolución social también haya durado tanto para surgir. No es que quiera la matanza de personas. Al contrario, lo que me pone a pensar es que siendo una cultura tan rica culturalmente, sea tan quieta en el vivir subyugados.

Vi tu publicación en La Nacion (CRC). Felicidades. saludos